Jeff Bezos: con el marketing hasta la estratósfera

Cuando alguien menciona a Amazon, son pocos los que no saben que se refiere a la plataforma de e-commerce más grande del mundo. Pocos son también los que no conocen a su fundador, Jeff Bezos, quien comenzó siendo un joven emprendedor lleno de sueños y logró cumplirlos uno por uno a base de mucho esfuerzo y perseverancia.

Pero su éxito no se fundó solo en eso. ¿Cuál pudiera haber sido su historia si no se hubiese valido de una buena estrategia de marketing?

Una vida de sueños

Como suele suceder, la infancia de Jeff Bezos ya presagiaba el rumbo que tomaría el destino de aquel niño nacido en Albuquerque en 1964. Era habilidoso, curioso y decididamente ingenioso. Cuando era adolescente, desarrolló un sistema de alarmas eléctricas para evitar que sus hermanos menores se acercaran a su habitación.

Se graduó con honores en la carrera de Ciencias de la Computación e Ingeniería Electrónica de la Universidad de Princeton. Su primer emprendimiento fue Cadabra.com, una librería online que llegó a tener 50 mil visitas al día. Funcionaba en el garaje de su casa y durante los dos primeros años, fueron el mismo Jeff y su esposa quienes se encargaron de armar los envíos y despacharlos.

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Empeñado en seguir cumpliendo sus anhelos de la infancia, en el año 2000 fundó Blue Origin, un proyecto que lanza cohetes al espacio para realizar viajes comerciales a un costo relativamente bajo. En 2021, pudo comenzar a concretarlo cuando formó parte del primer vuelo suborbital con tripulación exclusivamente civil.

La ambición como motor y el marketing como herramienta

Pero Jeff no llegó a ser quien es solo por poseer un espíritu soñador y una personalidad inquieta. Este hombre, que actualmente ocupa el primer lugar en la lista de las personas más ricas del mundo es también muy ambicioso. Nunca se da por satisfecho con sus logros, siempre busca ir por más. No le fue suficiente vender libros a través de Internet: quería vender todo aquello que a alguien le pudiera interesar comprar. ¿Y cómo lo logró? Con una gran estrategia de marketing, que consolidara sus sueños y terminaría yendo mucho más allá.

Poco a poco, comenzó a incorporar nuevos productos en el catálogo de su plataforma e-commerce, a la que le cambió el nombre por Amazon. Esto no fue antojadizo y tuvo su porqué gracias al marketing: tenía proyectado que Cadabra.com fuera tan inmensa, diversa e inabarcable como la selva brasileña, pero para eso necesitó conocer el comportamiento de los mercados y de los consumidores. Comprendió que debía conectar a compradores con vendedores de una manera limpia y transparente, sin dejar de ser simple y efectiva. Que recomiende comprar más y más de forma personalizada y contextualizada fue sin dudas el diferencial y el aspecto más innovador de Amazon.

La clave del éxito

El camino que inició Bezos cuando trabajaba en el garaje de su casa no lo hubiera conducido hasta donde está actualmente si no se hubiera valido del marketing asociado a una buena estrategia: hoy Amazon es el supermercado online más grande del mundo.

Con su primer emprendimiento online comprendió la importancia de acercar compradores y vendedores y de lograr que el intercambio fuera lo más fluido y placentero posible, eliminando todas las fricciones operativas y logísticas a las que el consumidor estaba acostumbrado hasta entonces. Un par de años más tarde, entendió que debía nutrirse del marketing para adaptarse y así crecer. El marketing personalizado no solo le generó mayor exposición, sino que le permitió ordenar sus prioridades y trazar objetivos claros a corto, mediano y largo plazo.

Hasta el día de hoy, Amazon se mantiene agregando nuevas características, servicios, adquisiciones y productos siempre con el mismo fin: siempre darle algo más a sus clientes. Mientras que el Amazonas funciona como el pulmón del mundo, Amazon ha logrado convertirse en el proveedor online del planeta.

Pero hay una distinción importante entre ambos: la inmensidad de la selva amazónica la vuelve casi imposible de recorrer y abarcar por completo, mientras que la plataforma desarrollada por Bezos ayuda a acortar distancias entre una necesidad y la satisfacción de esta. Millones de productos a solo un clic de distancia, prácticamente sin importar en qué parte del mundo uno se encuentre, gracias a su inteligencia artificial y la hiper-personalización de los contenidos.

Desde un primer momento, tuvo la visión necesaria para comprender que Internet era el futuro. Pero, además, colocó siempre al cliente en el centro de su negocio, teniendo como principal objetivo que la experiencia de compra y venta fuera fácil, rápida y sin fricciones. Ese es el principio rector del que se vale incluso en el día de hoy para llevar adelante todos sus proyectos y todos los sitios de e-commerce, quien más, quien menos, intentan copiar el modelo.

En febrero de 2021, Jeff Bezos abandonó su cargo de CEO en Amazon para ocupar el de Presidente Ejecutivo. Ya más alejado del día a día podría centrar su energía en sus otros proyectos: Blue Origin y The Washington Post. ¿Quién duda de que serán proyectos extremadamente ambiciosos y exitosos, apalancados en una estrategia de marketing innovador?

Jeff es único pero ¿habría llegado al mismo resultado si no se hubiera apoyado en una buena estrategia y un plan de marketing que le permitiera comprender el rumbo y el entorno del mercado?

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