Estimada/o suscriptor,
Si nos estás leyendo es porque hace algunos meses (¿años?) elegiste leernos a través de nuestro blog. En su momento y de forma automatizada, te debe haber llegado un mail agradeciéndote por tu interés pero hoy quiero darte las gracias especialmente.
Gracias porque en un año complicado y de mucha incertidumbre, quien más, quien menos vivió días y meses de mucha ansiedad. Al menos eso me pasó a mí desde marzo y como hasta junio no se me pasó. Gracias porque cada apertura de mail, cada blog que leíste fue una compañía cálida, nos sentimos acompañados y aunque no nos hayas devuelto un comentario, sabíamos que estabas ahí. Tu tiempo dedicado a leernos le dio sentido a todo lo que hacemos.
De los datos que estamos recopilando de todo este año, las páginas web de nuestros clientes tuvieron un crecimiento explosivo. Las aperturas y reacciones a los e-mails llegaron casi a triplicar los parámetros pre-COVID y sorpresivamente (o no tanto por ser B2B), las redes sociales no mostraron igual tendencia ni en interacciones ni en cantidad de seguidores. Dentro de los contenidos que más crecieron estuvieron los blogs y las webinars, las dos estrellas ganadoras de este año.
Las conclusiones después de varios meses (y con el diario del lunes todos somos genios) sabemos que entre abril y octubre todos estuvimos frente a una PC, trabajando mucho pero también con ese espacio mental para aprender, escuchar a otros, abordar temas que siempre nos interesaron y nunca teníamos suficiente tiempo para incursionar y actualizarnos.
En el caso particular de los blogs, tanto nuestros clientes como nosotros mismos vimos cuadruplicar las vistas. Ese tiempo de viajar entre la oficina y casa, movernos de un punto a otro entre reuniones, creo que se reemplazó con blogs y webinars que también triplicaron en registrados y asistentes. Si bien esos números comenzaron a bajar a fines de octubre, no se volvió al nivel pre-COVID sino que quedaron un 30% arriba en promedio.
Estos datos los quería compartir porque yo también vi más webinars que nunca (1 por semana o a veces 2), leí más newsletters y blogs que nunca, me suscribí a aquellos medios que me sonaban interesantes o innovadores o simplemente reaccioné desde la compasión: hacer el aguante. Acompañar, escucharlos, participar de las cosas que organizaban con pasión y esmero.
Como nunca, la virtualidad nos permitió eso, creo: acompañar y ser acompañados digitalmente, con las redes sociales en el caso de amigos y familias o a través de medios como este o en LinkedIn cuando se trataba de algo laboral. Todos buscamos estar cerca como si eso fuese garantía de seguridad y resguardo, casi un barbijo.
La ansiedad tiene para divertirse un rato con nosotros. Algunos van por la tercer ola y otros esperando la segunda, pero una cosa es segura: al 2021 llegaremos un poco más preparados emocionalmente, un poco menos desprevenidos, un poco más escépticos de las noticias exageradas y un poco más seguros de que no estamos tan solos. Un pequeño bicho logró lo que muchos políticos no lograron nunca, que es unirnos ante una misma amenaza y cuidarnos entre todos.
Gracias por estar ahí. Te deseo un cierre tranquilo de este 2020 y un 2021 con salud, trabajo y paz 🎄
Me pasa seguido que me suscribo entusiasmada a algún newsletter pero luego se me hace difícil mantenerme al día leyendo o simplemente deja de interesarme.
Si te pasa eso con nuestro blog, lo entiendo, no tiene nada de malo y te puedes desuscribir acá.
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