¿Analizando un emprendimiento propio? Mitos y verdades del start-up

Estuve en ese lugar y en ese momento con una idea dando vueltas en mi cabeza sin poder materializarlo, una convicción que no lograba verbalizar, un sueño. Quién no vivió alguna vez esa mezcla de querer emprender versus quedarse en la zona de confort con un sueldo (más o menos) asegurado; y otra vez... salir del cascarón pero mejor no... elijo el status-quo. Mi jefe es arrogante pero acá tengo un bonus casi asegurado. Entre el miedo y las ganas, los años siguen pasando...

Si te sientes llamado a ser dueño de tu propia start-up pero no te decides, sabes que no estás solo: todos los que han sentido alguna vez ese llamado atraviesan sentimientos contradictorios, mezcla de entusiasmo y ansiedad. Por un lado, es fácil imaginarte trabajando horarios flexibles y sintiéndote siempre motivado por el trabajo que tienes por delante. La convicción de que puedes aportar algo único, que nadie está ofreciendo y sólo puedes ofrecer tú, entusiasma y motiva. ¿A quién no, verdad?

Pero todo aquel que emprendió alguna vez conoció también las dudas que quizás ahora son un freno para realizar tu sueño: no tener claro por dónde empezar, temor de no llegar a lograr las metas que te propusiste, temor de no estar a la altura de tus propios sueños, temor al fracaso. Trabajar en la propia empresa no es solamente un estilo de vida: también es un arte que como tal, requiere de herramientas y habilidades. 

¿Qué puedo compartir 5 años después de gestar esta empresa, que aunque pequeñita fue creciendo año tras año?

Investigar con la curiosidad de un niño

Un estudio de la consultora CB Insights determinó que la razón principal por la que tantas start-ups no logran desarrollarse y desaparecen en el tercer año es simple: no hay demanda en el mercado para lo que ellas ofrecen. Si actualmente trabajas en relación de dependencia es probable que ya estés en contacto con el nicho al que apuntas con tu emprendimiento. Por eso, en esta etapa preparatoria, es inteligente aprovechar todas las oportunidades para hacer un seguimiento de cómo funciona ese nicho en el mercado.

El acceso a reportes de marketing relevantes puede darte herramientas que van a ser esenciales para tu inicio. Estudiándolos detenidamente se puede identificar y delimitar un segmento target en el mercado y comprender cuáles son sus puntos críticos. Una start-up que ofrece una solución a un problema en el mercado tiene las mejores posibilidades de desarrollarse y crecer.

Aún cuando no sea lo que quieres hacer el resto de tu vida, en tu trabajo actual puedes encontrar las herramientas para esa nueva vida que sueñas. En esta etapa de preparación es importante el compromiso con uno mismo, alimentando la curiosidad, aprendiendo cómo funcionan los procesos, evaluando qué recursos funcionan y cuáles no, estudiando casos, preguntándote qué cosas harías de una manera distinta. Quizás un curso de Canvas o leyendo libros de Alex Oesterwalder te brinde miradas distintas.

Andando el carro, se acomodan los melones

Creo que una planificación financiera es indispensable pero no esperar a tener todo perfectamente planificado. Como dice el dicho "lo perfecto es enemigo de lo eficiente" y nuestro mejor maestro es la experiencia.

En las etapas previas al comienzo de un emprendimiento es normal que aparezcan distintas preocupaciones y lo importante, creo, es tener en cuenta esto: la paciencia. La experiencia del emprendedor, sobre todo al principio, puede ser de inestabilidad tanto laboral como financiera.

Un modelo de negocios sólido y al mismo tiempo flexible son rasgos importantes de un buen emprendimiento, sin olvidar que muchas de las dificultades se resuelven durante el proceso de trabajo. Si hubiésemos esperado a que todo salga según lo planificado desde el principio, lo más probable es que HAL haya quebrado en el año 3 como le pasa al 80% de las start-ups. Adaptarse a lo que demanda el mercado rápidamente fue importante y andando el carro se acomodaron los melones.

Los 3 aspectos que no descuidamos, más allá de lo financiero y recomiendo no dejar fuera en el primer análisis:

• Foco en los productos/servicios y elegirlos significa dejar de lado muchos otros. Precio y política comercial pre y post-venta.

• Marketing: canales de venta incluyendo web, teléfono, e-mail, socios de negocios o canal, etc.

• Herramientas necesarias, suscripciones de plataformas de productividad y colaboración

• Roles y responsabilidades claras. Todos tendrán 2 ó 3 sombreros cada uno pero ¿cuáles sombreros? Un job description por persona es clave, aún si fuesen 3 personas.

¿Cómo desarrollar tus habilidades de emprendedor?

Emprender va mucho más allá de hacer uso de las capacidades técnicas que has adquirido durante tu vida profesional, sea de 5 años o 30. Marketing, gestión, contratación de empleados y liderazgo son algunos de los nuevos desafíos que aparecen. Por supuesto, cada quien desarrolla con el tiempo un estilo y una identidad propias que lo distinguen de los otros, pero existen algunas habilidades que son indispensables para todo el que quiera iniciar un nuevo proyecto, crecer y perdurar en el tiempo.

No todos sabemos de todo y tercerizar o pedir ayuda externa sea quizás la forma más liviana financieramente, segura y rápida de incorporar ese know-how a tu organización, mientras desarrollas las habilidades internamente. A continuación, las áreas claves que detecté en los primeros 2 años (que luego evolucionan):

• Comunicación

La habilidad para la comunicación es un atributo esencial de todos pero especialmente de un emprendedor. Comunicar claramente el valor de sus productos y servicios, el diferencial, ¿por qué con mi empresa y no con la de un competidor?, una web constantemente alimentada, un e-mail bien redactado y con información relevante. Todo es comunicación, no importa del canal que se trate.

Constantes reuniones 1 a 1 con cada colaborador, entender sus intereses y objetivos, motivarlos adecuadamente es otro frente que en las start-ups requieren una atención extra: no hay área de Gestión de Talentos y puede ser un área gris que nadie termina atendiendo y eso impacta en la atracción y retención de talentos.

• La "red"

El networking es la práctica a través de la cual los emprendedores crean una serie de contactos que abre oportunidades de negocios y nos acercan los negocios más inmediatos. Hasta los empresarios más influyentes continúan desarrollando su red de contactos permanentemente. En este aspecto es muy valioso aprender a vender y promocionar tus ideas sin resultar invasivo, que es la filosofía del Inbound Marketing.

El trabajo en relación de dependencia puede enseñarte a interactuar de una manera amena y al mismo tiempo efectiva: desde tu lugar actual puedes establecer contactos con personas importantes de la industria y expertos que más adelante serán piezas fundamentales en tu red de contactos. Y concentrate en perfeccionar el arte de crear valor. Un networking bien realizado te ayudará a recibir y procesar todo el feedback constructivo que recibas de tus propuestas.

• Resiliencia

La habilidad para superar situaciones adversas y adaptarse de manera eficaz a circunstancias inesperadas y novedosas es crítico. Iniciar una empresa no es fácil: a lo largo del camino tendrás que lidiar con sentimientos de ansiedad, incertidumbre, confusión. La buena noticia es que hay muchas maneras de ejercitar la resiliencia: la organización efectiva del tiempo, la capacidad para poner las cosas en perspectiva conversando con pares, colegas de la misma industria, siendo parte de foros que participen empresarios de similar perfil, etc. son algunas de las prácticas que contribuyen a su desarrollo.

"Nunca fué tan fácil emprender y nunca fue tan difícil sustentar una start-up" dijo Brian Halligan, CEO de Hubspot en una conferencia Inbound.

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